Listado de la etiqueta: Sexualidad consciente

La conexión espiritual y el masaje tántrico

No importa tener experiencia previa a la hora de recibir un masaje tántrico, si se entra en estado de Presencia y se respira profundamente, pueden surgir regalos inesperados, en formas insospechadas. Cuando cada célula de nuestro cuerpo está llena de oxígeno, toda nuestra atención puesta en el presente y tenemos un montón de energía circulando por todo el cuerpo… entonces sucede la CONEXIÓN… que puede experimentarse de múltiples maneras. Por eso cada viaje es único, por eso cuando te entregas con confianza y sin expectativas, sucede la magia.

Había leído sobre el masaje tántrico, pero no lo había experimentado. Quería encontrar una Shakti auténtica y no confundirme con una masajista erótica que se vende como si hiciera masaje tántrico.
Al final contacté con Llucia que me explicó en que consistía el masaje y luego me guio en todo momento, sobre todo en la respiración, que es fundamental.
Quiero compartir lo que experimenté. Fue un masaje sin prisas, muy gratificante, emotivo, placentero y relajante.
Lo que más destacaría es el sentir circular la energía por todo el cuerpo y, al final, la conexión que tuve con mis padres ya fallecidos, a los cuales pude abrazar con una sensación de Paz y gratitud.

Gracias Llucia

M.P.

abrazo masaje tántrico

El poder del abrazo y el masaje tántrico

Solo desde la entrega más total y más inocente, sucede la magia… un cuerpo vibrante, como un instrumento musical tocado por los Dioses.

Respirar y dejarse Ser, sentir y mirarlo todo con los ojos de niña, sabiendo que la propia luz necesita brillar de dentro a afuera… igual que una estrella. Atravesar toda la gama de emociones, incluido el miedo, saboreando el PLACER de sentirse viva.

Somos canales al servicio de la Vida, nada más y nada menos

La compasión (pasión compartida) que desde el primer momento encontré en los ojos de Lucía.

La seguridad de poder quitarme una a una todas las corazas y ser yo misma, conmigo misma, sin la necesidad de cumplir ninguna expectativa (ni de cara a los demás, ni de cara a mí).

Darme por completo a la respiración, sabiendo que únicamente a través de ella y las amorosas manos guías de Lucía, llega el encuentro con mi yo más íntimo, con mis raíces más profundas en las que todos los sentimientos conviven, donde alegría y pena se confunden.

Un yo íntimo en forma de pequeña luz, donde nada es juzgado, donde los motivos no tienen importancia, donde me abrazo a mí misma tan intensamente que poco a poco la pequeña bola de luz crece con una fuerza inconmensurable. Una fuerza que en forma de energía impresionante recorre todo mi cuerpo, le hace vibrar, le llena de vida, de fuerza, de emociones, de empoderamiento, de mí misma, de amor…

Y me siento agradecida y feliz de recuperar conciencia de que mi «yo» más íntimo es mi «yo» más externo… Gracias Lucía por acompañarme en el camino, por los abrazos externos, que son los abrazos internos conmigo misma.

M.

Texto original:

La compassió (passió compartida) que des del primer moment vaig trobar en els ulls de na Llucía.

La seguretat de poder llevar-me una a una totes les cuirasses i ser jo mateixa, amb mi mateixa, sense la necessitat de complir cap expectativa (ni de cara als altres ni de cara a mi).

Donar-me per complet a la respiració, sabent que únicament a través d’ella i les amoroses mans guies de na Llucía, arriba la trobada amb el meu jo més íntim, amb les meves arrels més profundes on tots els sentiments conviuen, on alegria i pena es confonen.

Un jo íntim en forma de petita llum, on res és jutjat, on els motius no tenen importància, on m’abraço a mi mateixa tan intensament que poc a poc la petita bolla de llum creix amb una força incommensurable. Una força que en forma d’energia impressionant recorre tot el meu cos, el fa vibrar, l’omple de vida, de força, de emocions, d’empoderament, de mi mateixa, d’amor…

I em semto agraïda i feliç de recuperar consciència de que el meu «jo» més íntim és el meu «jo» més extern… Gràcies Llucía per acompanyar-me en el camí, per les abraçades externes, que són les abraçades internes amb mi mateixa.

M.

 

La metamorfosis y el masaje tántrico

Cada experiencia tántrica es única y, muchas veces, lo más espectacular sucede de forma discreta. Me encanta sentir la conexión desde el Ser esencial, entrar en presencia sin expectativas, con total entrega al momento presente, notando la confianza mutua,… Me encanta ver lo que se despliega y sentir ese AMOR que nada espera. Disfruto de quedarme meditando después del masaje y dejar el espacio/tiempo donde se abre un mundo de posibilidades. Me sorprendo de la intensidad y de la originalidad de cada historia, de como su mensaje es personal e intransferible…  y viene para quedarse en el corazón de cada persona.

Todo comenzó con esta parte de meditación y conexión con mi guía y cuando conseguimos esta conexión empecé a ver todo en un tono morado (me ha pasado más veces cuando he recibido sesiones de canalización de energía).

Comenzamos con el masaje y sentí que me estaba cuidando mucho y después percibí que me estaba purificando y limpiando. Hubo un momento en que empecé a sentir una felicidad extrema y como muy llena, y de repente estaba llena de luz blanca que salía del eje central de mi cuerpo.

Lo veía todo muy geométrico y mi cuerpo era como si estuviera formado por dos alas que aleteaban como si fuera una mariposa.

Empecé a llorar, pero con unas lágrimas que nunca había sentido así, eran muy gruesas y redondas, salían a chorro y empecé a sentir que podía empezar de nuevo, empezar de cero tantas veces como quisiera. Ví muchas mariposas preciosas y era como si yo fuera todas ellas y pudiera posarme muy suavemente sobre todos, demostrando mucho amor y cariño…  y terminando mi experiencia tántrica por esta vez.

Texto original

Tot va començar amb aquesta part de meditació i conexió amb la meva guia i quan vam aconseguir aquesta conexió vaig començar a veure tot en un to morat (m’ha passat més vegades quan he rebut sessions de canalització d’energia).

Vam començar amb el massatge i vaig sentir que m’estava cuidant molt i després vaig percebre que m’estava purificant i netejant.
Va haver-hi un moment que vaig començar a sentir una felicitat extrema i com molt plena, i de sobta estava plena de llum blanca que sortia de l’eix central del meu cos.

Ho veia tot molt geomètric i el meu cos era com si estigués format per dues ales que aletejaven com si fos una papallona.

Vaig començar a plorar, però amb unes llàgrimes que mai havia sentit així, eren molt gruixudes i redondes i sortien a raig, i vaig començar a sentir que podia començar de nou, començar de zero tantes vegades com vulgués.
Vaig veure moltes papallones precioses i era com si jo fos totes elles i pogués posar-me molt suament sobre tothom, demostrant molt amor i carinyo…  i acabant la meva experiència tàntrica per aquesta vegada.

R.C.

La activación de la energía en el masaje tántrico

Cuando te entregas a un masaje tántrico con confianza y RESPIRAS, es cuando te esperan hermosas experiencias con la activación de tu energía, entonces puedes «rozar» el encuentro con la potencialidad de todo lo que va más allá del mundo tangible.

 

Ayer recibí un masaje tántrico, mi primer contacto con esta práctica. Aún estoy impactada.

La persona que me regaló la sesión, porque así lo sentí, es una persona en la cuál confío, Lucía. Esta confianza fue fundamental para dejarme llevar por un camino lleno de sensaciones sutiles, agradables, deliciosas, que activaron mi energía; incluso sentí que esa energía se amplió hasta fusionarse con la suya. En una danza preciosa, una danza de luz.

Me dejé guiar por ella, por su voz, por sus respiraciones, por sus manos.
Conseguí que mi mente no juzgara, y yo solamente sentía.

Experimenté placer a nivel físico, con una estimulación sutil, suave, envolvente, experta pero a medida que transcurrió la sesión esas sensaciones se ampliaron a otro nivel, al nivel energético. Noté justo encima de mi cuerpo esa energía, como un amplificador de las sensaciones que estaba viviendo.

Me permití disfrutar cada segundo, dejándome llevar, confiando en Lucía.
Fue precioso poder regalarme a mi misma ese permiso.

Puedo percibir aún hoy bienestar, placer. Siento que se ha activado también, de alguna manera, mi energía sexual, que en este momento se encontraba relegada a un segundo plano, por no decir a un último plano.

Sentí tanta calma, tal bienestar, conectada conmigo mismo y con Lucía y con el universo como nunca antes había sentido.

Lucía….un millón de gracias. Eres un Ser Precioso.

Efecto en la materia del masaje tántrico

En el masaje tántrico la materia y el espíritu se funden y la poesía  surge donde es difícil poner palabras. Un alma sensible se eleva en conexión y vive su viaje de reflejos. Yo soy tu, tu eres yo. No hay distancia, tiempo ni edad. Es fusión en movimiento.

 

Lo creado es un reflejo de lo intangible, de lo que No Tiene Nombre. El ojo es lo que ve, pero no el que ve, así pues, nuestros cuerpos son un mero transmisor, pero no el que siente.

Una nueva experiencia, por otra parte insospechada, ha caído como brasa divina a mis pies. Bien se yo esta brasa de amor de donde sale, pero nunca sentí un ángel con mi misma carne, bebiendo del mismo vino, que nos embriaga de dicha y felicidad. El léxico apenas puede describir mis sentimientos.

Dicen que al final pasan rápidamente las escenas vividas, pero esta tarde pasará nítida y despacio, y sé, que algún día nos volveremos a abrazar como hoy.

Las almas se encienden, pero es de una misma Luz. Mediante el tantra me enseñaste ese milagro de arder en el mismo fuego, de prender uno de otro y ambos arder en la misma luz.

Gracias por tu llama, tu amor y tu luz.

R.

La conexión con la naturaleza y el masaje tántrico

La confianza es importante, sobretodo cuando la experiencia se percibe como extraordinaria y fuera del ámbito de la zona de confort. Es hermoso ver como se despliega lo sutil y lo sagrado, como el Ser se siente honrado y celebra la Vida.

 

Me gusta vivir mi sexualidad de forma privada, sólo conmigo misma o con mi pareja, cuando la tengo.

Sin embargo, como conozco a Llucia y confío plenamente en ella, decidí abrirme a la posibilidad de experimentar aquello que sentía que sería bello y sanador para mí.

No quise buscar información para no condicionarme. Simplemente decidí confiar.

La experiencia fue preciosa. Me sentí muy cómoda en todo momento, con mucha paz y gratitud.

Me tranquilizó sentir, durante toda la sesión, el acompañamiento sutil, delicado y respetuoso, desde lo sagrado, que es el lugar que ocupa la sexualidad para mí.

Sentí como si se tratara de un ritual ancestral de pureza y consciencia, en el que se honra al ser, y el cuerpo recupera su sabiduría, su conexión con la madre naturaleza, que nos sostiene y nos ama sin pedir nada.

Ojalá nuestra iniciación al amor se diera de esa forma, consciente y saludable, para todos.

Gracias, querida Llucia.

M.A

La memoria del cuerpo en el masaje tántrico

Es impresionante cuando hago un masaje tántrico y veo vibrar el cuerpo para sacar a la luz las memorias profundas de los tejidos, para sanarlos.

 

Lo primero que sentí fue casi una memoria. Imaginé los antiguos templos donde se iniciaba a los y las jóvenes en el arte de la sexualidad.

Sentí con claridad como aquellas iniciaciones imprimían en nuestros cuerpos la referencia de cómo es ser tocadas con respeto, con honestidad y amor. Me embargó una gran sensación de desamparo al reconocer la lejanía de esta memoria… Y lo huérfanos y huérfanas que estamos a la hora de aprender cómo vincularnos con nuestro propio cuerpo y, también, con el goce de estar vivas y vivos.

El resto del masaje fue un viaje largo, entre el entregarme y el permitirme ser atravesada por sensaciones e imágenes, así como por el dolor cristalizado en mis tejidos.

Nada más sanador que poder liberar el cuerpo de sus cargas, sobre todo de la mano guía, amorosa y certera de Llucia.

Liberar para conectar… O, sencillamente, para que se manifieste lo que siempre ha estado: el sabio diálogo entre nuestra base y nuestro corazón.

Toda mi gratitud.

A.

 

 

Lo sublime en el masaje tántrico

Veo como en cada persona se crea una resonancia única cuando recibe un masaje tántrico, para cada experiencia hay un aprendizaje. Presenciar como se integran todas las partes del Ser, es un gran regalo.

 

Per definir la meva experiència  en una sola paraula diria SUBLIM!.

Despertar i incloure l’energia sexual dins el massatge per llavors recanalitzar-la, em sembla una eina formidable per a fomentar  l’apoderament  personal.

El fet de què aquest tipus de massatge sensitiu,  inclogui, si la persona accepta,  les zones erògenes  , aquelles que normalment es mantenen al marge durant la sessió d’un massatge terapèutic convencional, fa que se te despertin un sense fi d’emocions, sentiments i sensacions que van més enllà del cos físic.

El trobo un tipus de massatge molt respectuós i  integrador de tot allò que mos defineix i caracteritza com a éssers humans.

M.M.

 

Para definir mi experiencia en una sola palabra diría ¡SUBLIME !.

Despertar e incluir la energía sexual dentro del masaje para después recanalizarla, me parece una herramienta formidable para fomentar el empoderamiento personal.

El hecho de que este tipo de masaje sensitivo, incluya, si la persona acepta, las zonas erógenas, aquellas que normalmente se mantienen al margen durante la sesión de un masaje terapéutico convencional, hace que se te despierten un sin fin de emociones, sentimientos y sensaciones que van más allá del cuerpo físico.

Lo encuentro un tipo de masaje muy respetuoso e integrador de todo aquello que nos define y caracteriza como seres humanos.

M.M.

El masaje tántrico y el placer

No puedo saber qué regalo va a traer un masaje tántrico, porque al CONECTAR siempre es un misterio lo que necesita ser expresado y lo que estás preparado para conocer, en realidad solo está garantizado que lo que surge es una experiencia auténtica. De esas que te tocan el corazón. Es precioso descubrir que el placer está en ti y que nunca es tarde cuando, por cualquier motivo, se cortó la conexión en tu cuerpo.

«Asombrada por la experiencia cuando te dejas fluir, te dejas Ser, te dejas sentir, te rindes al placer, no importa el sexo, no importa la persona, no importa quién sea,… lo importante es estar presente en el aquí y ahora, el placer siempre está cuando te abres y lo dejas entrar»

E.